Una de las escenas más importantes de la novela sucede durante un concierto de los Waterboys, el que dieron en la playa de Riazor el 31 de julio de 2.001.
En principio estaba previsto que se desarrollara en el de Iggy Pop en Santiago, el año anterior, pero un fallo en el cronograma había llevado la trama hasta un año más tarde y no había forma de comprimir los acontecimientos.
El problema era que ese año no tenía ningún concierto disponible al que hubiera asistido y siempre es mejor escribir sobre algo que hayas vivido antes que fabular.
El de los Waterboys encajaba a la perfección en la cronología, por lo que me pasé dos semanas viendo todos conciertos que tenían colgados en Youtube. Llegué a montar uno con el set-list original, para poder darle mayor realismo. Al final salieron dos de los capítulos más icónicos, a mi modo de ver, de la novela.
Hoy actúan en Coruña y me podré quitar esa espinita de no haberlos visto nunca en vivo.
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